Surviving in a Wolrd |
No me cansaré de repetir varias cosas en mis escritos de
Subterránica, la primera, que en Colombia el nivel del Rock es increíble, que aún
es de los pocos países en los cuales tenemos una escena viva del género y que
podemos ser un pilar para la reconstrucción del mismo en América Latina. La
segunda, que de nada nos sirve esto si no estamos todos conectados en el
objetivo de lograrlo. La tercera, que ser jurado en cualquier práctica
artística no significa calificar a los demás por el gusto personal, por “si me
gusta o no”, sino por los parámetros que puedan ser comunes en la realidad de
todos.
Quiero explicar el último punto. Recibí un mensaje en
Facebook en donde una banda que se presentó al festival Altavoz en Medellín fue
rechazada en la Audición por los jurados y el argumento que les dieron fue una
lista de puntos en las que le hacen algunas recomendaciones como “No se debe
cantar rasgado, mejor limpio” y “Los vientos tienen demasiado protagonismo” entre
otras cosas. Yo respeto como quieran manejar cada evento de Rock en el mundo, pero
que un jurado responda esto me parece además de ridículo, atrevido. Juzgar a
las personas por cuestiones de gusto nadie lo puede hacer, es un acto
irresponsable el proclamar desde lo individual que es bueno o que no lo es, la subjetividad
del espectador es única y si le gusta o no la música de una banda es una cuestión
que no se debe discutir. U2 tuvo que salir a pedir disculpas por haber
publicado sin preguntar en ITunes su último disco, ellos asumieron que a todo
el planeta le gustaba su música, y a pesar de que yo pienso que es una
excelente banda, parece que solo el 5% de los casi 30 millones de usuarios de
Itunes piensan igual. Por lo tanto, la responsabilidad en este país de los mal
llamados “jurados” y “Curadores” es más grande de la que se tiene y es hora de
ir pensando en eso y de que se pongan más serios en la tarea, ya que es a
través del reconocimiento y la sana competencia que cualquier área de
conocimiento se desarrolla.
Por otra parte la jornada final de El Monster del Rock
estuvo bien. Desde el comienzo nos dimos cuenta de un error que siempre
comentemos: Invitar bandas para después salirles a deber, eso está mal. Cuando
invitamos bandas que no han pasado por el proceso de enfrentarse a 50 más, de
que la invitaciónno les cueste nada, de hacerlo por el solo hecho de pensar que
son buenas bandas y que pueden enriquecer el evento, ellas se sientes
superiores y en este caso fueron el detonante de varios de los problemas
logísticos que tenemos. Debíamos compartir tarima con las actividades del
patrocinador de la misma, con otros actos que no eran parte del concurso y por
lo tanto el tiempo era extremo, pero las bandas invitadas, en su afán de
“estirar el momento Rockstar” no respetaron esto, no hicieron caso del horario
y por lo tanto dos bandas invitadas no lograron tocar. Sumándole que Corferias
cerró el pabellón una hora antes de lo acordado por su política de ruido que
obviamente solo aplica para el Rock porque los demás días no sucedió. Me
pregunto ¿Será que las bandas que invitan a Rock al Parque se comportan así?
No, ¿verdad? Porque allá los bajan, nosotros no hemos logrado ser así de
déspotas, nosotros aun creemos que los seres humanos tienen la capacidad de
pensar y de analizar que lo común debe ser bueno y divertido para todos, pero
como pasa casi siempre en Subterránica y en los modelos alternativos de
construcción del Rock en Colombia, uno termina es de enemigo con las personas a
las que se le abren los espacios, esta vez no fue la excepción y da tristeza
ver que las bandas se creen mucho más de lo que son. Así el show sea genial, de
nada sirve cuando esto pasa. Les hablo desde el punto de vista del productor
del evento más no del público, porque el público no se da cuenta de esto, son
problemas "internos”, es un daño para la organización, no para el evento,
en este caso para la armonía de los demás que participan y vuelvo a insistir
también como por millonésima vez que las bandas deben auto organizar eventos
para saber lo que es esto.
Este artículo se pretende para que lo lean las bandas
participantes, los involucrados y los interesados en la escena de una manera
profunda, para los aspectos de promoción y otros se saca un comunicado de
prensa que reproduzco al final y es el que debe ser difundido masivamente, sin
embargo este también es un artículo público.
Vamos a hablar de las bandas participantes y el proceso de
cómo se seleccionó al Monster del Rock.
Piel Camaleón fue el que rompió con esa “tragedia” en la que
venía montado yo y mi equipo porque fue la primera banda concursante. Y miren,
jóvenes de 17 años que tienen sus instrumentos perfectamente listos, se montan
a la tarima, se demoran 8 minutos nada más en estar listos y le dan una clase
magistral de como sonar a los que le habían precedido. Aunque las dos primeras
bandas invitadas eran bandas increíbles, por eso se invitaron, se había tomado
cada una más de 20 minutos para arreglar un sonido que supuestamente estaba
probado desde la noche anterior, después en su presentación las guitarras
tronaban y no dejaban escuchar el resto del ensamble, alcancé a pensar que era
culpa del ingeniero de sonido pero cuando se montó Piel Camaleón me pasó lo
mismo que con Black Label Society en Rock al Parque, ¡el que sabe, sabe!!! Esos
muchachos pueden ir siendo hoy por hoy la mejor banda joven del país, no crean
que tocan tres acordes y gritan sino que exploran desde los lados del funk
hasta el progresivo. Excelentes, no se puede decir que les falta “cancha”
porque a pesar de sus pocos años, se han gastado su vida estudiando y haciendo
Rock desde muy chicos. Ahora, en El Monster del Rock estábamos buscando esa
“fuerza natural” parafraseando a Cerati, lo que llamamos el feeling del género
en sus músicos, en la forma de vivir el momento, en transmitirle al público
algo más que música muy bien hecha, Piel Camaleón en este punto se limita a
llevar una partitura de música y movimientos que vimos desde la primera
batalla. Pero no son una banda de muchachos agresivos, ¡son lo que son! Y por
ahora eso está más que biien. Gran agrupación.
Proto es otra gran agrupación Bogotana, su guitarrista Oscar
Mora y su bajista Daniel Ospina de lejos fueron los mejores en los instrumentos
en este concurso, la banda es una constante clase de técnicas en estos dos
instrumentos, le llega al público fácil a pesar de explorar ritmos complejos,
la batería se acopla muy bien. Tenemos que ver a Proto en dos partes, la
primera la banda, la segunda la voz, las dos partes son por separado
excelentes, el rango vocal de su front girl y la versatilidad con la que maneja
su voz es notable, ahora si mezclamos estas dos partes ahí es donde pasa algo,
hay que compenetrar a la banda con la voz o viceversa, hay bandas así en el
mundo en donde la voz es una “némesis” de la banda pero en el buen sentido de
la palabra. Sin embargo a Proto no hay nada que decirle, hoy por hoy son los
únicos representantes de este tipo de Metal técnico y versátil que está en la línea entre lo comercial y lo
under, que le gusta a una gran parte del público, se cuidan en actitud, en lo
que usan, son uniformes en todo.
Sanctuarium personalmente me pareció el mejor show de todo
el Monster del Rock, por su música, por su estética y por la energía tan brava
que tienen. Pero es esa misma energía la que los puede llevar a saturarse a
ellos mismos. Sactuarium brilló en la batalla pero en la semifinal ya se veían
más tensos, en SOFA ellos mismos llenaron más espacios de los que necesitaban.
Es una gran banda que impacta desde el momento en que comienzan a tocar, pero
en la final adicionar a un gran guitarrista como Jorge Burbano lo que hizo fue
llenar una línea que no se necesitaba, Jorge es de los mejores músicos y
maestros de Rock que tenemos en el país pero Sanctuarium no necesita de estas
armas para ganar, para ser escuchados, tampoco de llevar a un increíble
ingeniero de sonido y tomarse gran cantidad de tiempo en comenzar, de por si
son una banda enorme, muchos músicos, entre más llenen es más difícil cuadrar
ese sonido y en media hora eso no se hace, requiere de una prueba anterior, se
complicaron ellos mismos. Lo que pasó al final es que reventó y la voz de
Camilo se podía apreciar ya que la puede colocar en el micrófono para tronar al
ser gutural, pero Tatiana se perdió entre las distorsiones y las líneas de violín,
yo tengo que decir todo esto, porque es una de mis bandas favoritas en el metal
nacional pero hay que bajarle al nerviosismo y al estrés, tocar debe ser
agradable para el músico, cabe apuntar que Sanctuarium logró enloquecer a todo
el que ingresaba al pabellón, la reacción que ocasionó en los asistentes fue
genial.
A.C.M.E está por encima de esto, grandes músicos que llevan
años tocando y si estuvieron en SOFA se dieron cuenta de la clase que nos
dieron en cómo acceder a un público extraño a través de las técnicas escénicas
del punk. La música le fascina a los muchachos y a los que ya estamos más
viejos nos recuerda todo aquel movimiento que se gestó desde los noventa
después de que Green Day sacara el “Dookie”. Músicos comprometidos con lo que
hacen y de una calidad innegable. Nada más que decir, sencillamente es A.C.M.E,
tal vez es el género el que en un concurso no resalta tanto, al estar en medio
de bandas que elaboran tanto las frases de las guitarras, los bajos, los
teclados, el punk queda en un estado de desventaja, pero la fuerza que esta
banda tiene no la consigue mucha gente, suerte que estuvieron en el monster.
Surviving in a World tiene claro ya como es su partitura de
música y movimiento, relajados, montaron, se aguantaron al cuentero, ya sabían cómo
era. Surviving in a world sabe cuáles son sus ventajas y cuales sus
desventajas, por eso saben esconder las últimas y sacar a relucir las primeras.
El espectáculo en vivo es entretenido, tenían en la final esa fuerza que
buscábamos en la música, en la voz, la
sincronía entre ellos y sin tanta “vaina” lograron la mejor presentación de la
jornada. Limpia y clara, llegaron a lo que era y nada más, no quisieron alargar
el momento, no se tomaron el tiempo de nadie, tocaron tres canciones cortas y
buenas, sonaron como deberían haber sonado y se acabó, se bajaron y se
dedicaron a estar ahí. Y como escribíamos una y otra vez, una y otra vez en
todos los correos que enviábamos, esto no era un concierto, era un concurso. El
jurado jamás tuvo la intención o la obligación de calificar como era el show de
una banda, como si una canción era más larga entonces era mejor, el jurado tenía
tres puntos que debía calificar y media canción bien tocada con un buen show ya
era suficiente, no tenían que alargar eternamente ese momento, no teníamos afán
de ver a Tool, Rob Zombie, Foo Fighters o cualquiera que ustedes crean son los
mejores rockeros del mundo, sola y sencillamente queríamos ver una banda que no
se estresara, que hiciera las cosas bien, eso fue Surviving in a World, por eso
ganaron, por eso son El Monster del Rock, por su profesionalismo en hacer lo
que hacen, por respetar al rock y a las demás bandas y porque además son
grandes músicos y tienen un show contundente y entretenido. Punto.
Mano Diestra tampoco tiene muchos comentarios, gran nivel,
grandes canciones, excelente espectáculo, mucha energía. La razón por la que
Mano Diestra no fue El Monster del Rock es porque se dejaron llevar del afán y
“totearon” las guitarras, un pequeño error técnico que no nos dejó esta vez
escuchar su producción creativa. No sé qué pasó, tal vez fue porque ya
estábamos terminando y estaba presente un poco ya el cansancio y otros
factores. Esta es la banda que puede romper los esquemas del rock actual, son
jóvenes, ejecutan bien pero lo mejor de ellos es que la música que hacen es
actual, no tiene esos tintes del rock que lleva años sonando como si lo
tuvieron la mayoría de finalistas que llegaron a SOFA, ese es su punto fuerte y
ese es el punto que hay que ponerle atención, lo que más se busca es un nuevo
sonido y ellos casi que lo tiene.
Ahí tiene Colombia seis enormes bandas de Rock a las que
pueden invitar a tocar en los eventos masivos y darle ya un descanso a los
mismos de siempre, refrescar la escena del rock nacional que los medios y las entidades del distrito convirtieron en
lo más aburridor del mundo con sus ganas de robar dinero, ganar dinero y mover
dinero a costa de sus amigos para no repartir con nadie más, colocando en un
mismo año 30 veces los mismos nombres es sus eventos ¿No les da vergüenza?
Claro que no, !ni se han dado cuenta!
Fue un gran concurso, cansado, largo, sin lujos. Surviving
in a World es un gran ganador que se suma a la lista de bandas increíbles que
han ganado El Monster del Rock. Esto es un proceso, y se está haciendo bien.
Gracias a todos lo que de una u otra manera se involucraron.
@felipeszarruk
Subterránica
@felipeszarruk
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